Acompañamiento Duelo

El duelo es comúnmente definido como el proceso por el que atraviesa una persona ante la pérdida de un ser querido. El objetivo formal de la Tanatología es humanizar el proceso de la muerte y el duelo, proporcionando al enfermo y a la familia el apoyo emocional necesario.

«La tanatología es una disciplina científica que se encarga de encontrar el sentido al duelo en el proceso de la muerte, sus ritos y significado concebido como disciplina profesional, que integra a la persona como un ser biológico, psicológico, social y espiritual para vivir en plenitud y buscar su trascendencia”.

Por otro lado, es importante remarcar que en la tanatología, el proceso de duelo también puede ser experimentado ante otras pérdidas significativas que no se relacionan a la muerte, como por ejemplo: cambio de trabajo, despido, divorcio, pérdida de la salud etc. Es decir, se relaciona con eventos que provocan la pérdida de la estabilidad. Esto es relevante, ya que el sufrimiento experimentado por  las pérdidas en las situaciones de la vida diaria, comúnmente no reciben o no son tomadas con la relevancia que estas merecen. Estos eventos son alteraciones y pérdidas de estabilidad que afectan seriamente al individuo, sus relaciones y hasta la percepción que posee de sí mismo.

El duelo es una respuesta natural y normal en las personas, es un proceso de transformación necesario, en donde se atraviesan fases o etapas, que permitirán a la personas recuperar el equilibrio mental y aceptar la pérdida de una forma sana y adaptativa al darle un sentido. El proceso de duelo está compuesto por diferentes etapas: Negación y aislamiento, ira, negociación, tristeza y aceptación pacífica.

El duelo no es considerado un trastorno, sin embargo, un acompañamiento y tratamiento permiten su desarrollo de una manera efectiva y sana. Por otro lado, un duelo patológico es aquel en el cual se presenta una intensidad extrema de emociones así como una duración anormal. Esto ocurre al presentarse un duelo reprimido, aplazado ó crónico.

Los objetivos principales del tanatólogo o tanatóloga en el tratamiento en el duelo es la contención emocional, aminorar el sufrimiento, acompañamiento de las fases evitando el desarrollo de un duelo patológico, habilidades de afrontamiento, resolución conflictos asociados a la pérdida, aceptación, sentido en la pérdida y cierre de ciclos.

Asimismo, como tanatóloga, durante el tratamiento se trabajará situaciones específicas como: culpa, desesperanza, ira, tristeza, dolor, arrepentimientos, temores, el bien morir en cuidados paliativos, trabajo con los familiares, despedidas, entre otros elementos.

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